La semana pasada tuvimos la suerte de pasar unos días disfrutando de Dubai, muy pronto os traeré una guía para recomendaros todos los sitios a los que tuvimos la oportunidad de ir.
Pero ahora, me moría de ganas por enseñaros estas fotos que nos hicimos en nuestro Safari por el desierto con Platinum Heritage. Nos recogieron en el hotel, y tras una hora de viaje, nos encontramos con un grupo de turistas de todas partes. Allí nos dividieron en Land Rover Vintage (a nosotros nos tocó solos, porque nuestros compañeros eligieron tour en camello, así que nos vino deluxe). Eso si, primero nos pusieron a todos un Ghurta (el pañuelo típico en la cabeza). Después, nos introdujimos en el desierto, entre las dunas, y nos dejaron disfrutar de las vistas y hacer algunas fotos. Desde ahí, nos llevaron como si de un rally se tratase por las dunas, ¡una auténtica pasada! También vimos algunos animales e hicimos una segunda parada dónde nos recibieron con unas bebidas justo al atardecer mientras posteriormente, nos llevaron a un espacio con cojines mesas y shishas, dónde se nos trató como se trataba antiguamente a los invitados en el desierto.
Nos recibieron con con un café y un dátil. El café no llevaba azúcar ya que la idea es un sorbito, y un mordisco del fruto. Para comer nos dieron pure de lentejas y cordero, acompañado de arroces y especias, cocinado a la manera antigua, cuando se dejaba macerar durante 3 días, pero ahora se puede hacer en tan solo 12 horas. Al mismo tiempo, disfrutamos de los bailes típicos mientras fumábamos shisha bajo el cielo estrellado.
Una experiencia brutal, que recomiendo al 100% si tenéis la oportunidad de ir.
La semana pasada tuvimos la suerte de pasar unos días disfrutando de Dubai, muy pronto os traeré una guía para recomendaros todos los sitios a los que tuvimos la oportunidad de ir.
Pero ahora, me moría de ganas por enseñaros estas fotos que nos hicimos en nuestro Safari por el desierto con Platinum Heritage. Nos recogieron en el hotel, y tras una hora de viaje, nos encontramos con un grupo de turistas de todas partes. Allí nos dividieron en Land Rover Vintage (a nosotros nos tocó solos, porque nuestros compañeros eligieron tour en camello, así que nos vino deluxe). Eso si, primero nos pusieron a todos un Ghurta (el pañuelo típico en la cabeza). Después, nos introdujimos en el desierto, entre las dunas, y nos dejaron disfrutar de las vistas y hacer algunas fotos. Desde ahí, nos llevaron como si de un rally se tratase por las dunas, ¡una auténtica pasada! También vimos algunos animales e hicimos una segunda parada dónde nos recibieron con unas bebidas justo al atardecer mientras posteriormente, nos llevaron a un espacio con cojines mesas y shishas, dónde se nos trató como se trataba antiguamente a los invitados en el desierto.
Nos recibieron con con un café y un dátil. El café no llevaba azúcar ya que la idea es un sorbito, y un mordisco del fruto. Para comer nos dieron pure de lentejas y cordero, acompañado de arroces y especias, cocinado a la manera antigua, cuando se dejaba macerar durante 3 días, pero ahora se puede hacer en tan solo 12 horas. Al mismo tiempo, disfrutamos de los bailes típicos mientras fumábamos shisha bajo el cielo estrellado.
Una experiencia brutal, que recomiendo al 100% si tenéis la oportunidad de ir.