Después de un fin de semana intenso, con la celebración de la 33 edición de Los Goya, a la que he tenido el privilegio de asistir de la mano de Moët Chandon. Está vez, como ya sabréis, se ha celebrado en Sevilla, consiguiendo darle un aire más romántico a los premios del Cine español.
Todo comenzaba con un AVE a las 10 a.m, el mismo sábado que se celebraba la gala. Check in en el hotel y comida a la orilla del río con vistas a la torre del Oro, junto a nosotros todo el equipo que Moet había invitado de todas partes de España. Entre los que se encontraba: Mypeeptoes, Pelayo Diaz y Andy, Marta Lozano y Teresa de Andrés con sus respectivos (Lorenzo e Ignacio), Enrique Solís y Maria Fdz-Rubíes entre otros actores, periodistas y equipo parte del equipo nacional e internacional de la marca.
La cuenta atrás había comenzado, debíamos empezar a prepararnos para la fiesta del cine español. Me enfundé el esmoquin de Silbon, unos gemelos de zafiros (aunque creo que no se aprecia en las fotos) y reloj de Bulgari. Después nos fuimos a la Plaza de España para hacer algunas fotos antes de que se fuera el Sol. Os podéis imaginar, pleno sábado, tiempazo y punto turístico y ¡Paula y yo de Gala! La gente estaba alucinando. Pero hicimos unas fotos, que desde luego mereció la pena pasar ese mal rato. De aquí fuimos directos al hotel, donde nos habían dejado una botella y un perfume para comenzar la noche. Pero antes de salir, habíamos quedado con el equipo de Moët para hacer unas fotos del grupo.
No era la primera vez, ya hemos ido en varias ocasiones a los premios Goya, pero al ser en una ciudad diferente y encima con tantos amigos, hacía que no solo fuera un privilegio estar ahí, sino que podíamos disfrutar mucho más. Nosotros no entramos al patio de butacas, estábamos en la sala VIP de Moët, por dónde pasan todos los entregadores y premiados después de la entrega de premios. Desde aquí vimos cantar a Rosalia, nos emocionamos con Jesús Vidal y su discurso tras recibir el galardón a mejor actor novel, y vimos todos y cada uno de los chistes de Buenafuente y Silvia Abril, mientras brindamos por todos y cada uno de los premiados.
Una vez acabada la ceremonia, ya solo faltaba continuar la noche en la fiesta privada que organizada Paz Vega junto a Bulgari en el palacio de Villa Luisa. Desde luego, no pudo ser mejor. ¡Sin duda un fin de semana de película!
Y muchas gracias a Jesús Isnard por estar toda la noche detrás de la cámara y ayudarnos a capturar los mejores momentos de la noche ¡Os dejo alguna de las mejores imágenes!
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Después de un fin de semana intenso, con la celebración de la 33 edición de Los Goya, a la que he tenido el privilegio de asistir de la mano de Moët Chandon. Está vez, como ya sabréis, se ha celebrado en Sevilla, consiguiendo darle un aire más romántico a los premios del Cine español.
Todo comenzaba con un AVE a las 10 a.m, el mismo sábado que se celebraba la gala. Check in en el hotel y comida a la orilla del río con vistas a la torre del Oro, junto a nosotros todo el equipo que Moet había invitado de todas partes de España. Entre los que se encontraba: Mypeeptoes, Pelayo Diaz y Andy, Marta Lozano y Teresa de Andrés con sus respectivos (Lorenzo e Ignacio), Enrique Solís y Maria Fdz-Rubíes entre otros actores, periodistas y equipo parte del equipo nacional e internacional de la marca.
La cuenta atrás había comenzado, debíamos empezar a prepararnos para la fiesta del cine español. Me enfundé el esmoquin de Silbon, unos gemelos de zafiros (aunque creo que no se aprecia en las fotos) y reloj de Bulgari. Después nos fuimos a la Plaza de España para hacer algunas fotos antes de que se fuera el Sol. Os podéis imaginar, pleno sábado, tiempazo y punto turístico y ¡Paula y yo de Gala! La gente estaba alucinando. Pero hicimos unas fotos, que desde luego mereció la pena pasar ese mal rato. De aquí fuimos directos al hotel, donde nos habían dejado una botella y un perfume para comenzar la noche. Pero antes de salir, habíamos quedado con el equipo de Moët para hacer unas fotos del grupo.
No era la primera vez, ya hemos ido en varias ocasiones a los premios Goya, pero al ser en una ciudad diferente y encima con tantos amigos, hacía que no solo fuera un privilegio estar ahí, sino que podíamos disfrutar mucho más. Nosotros no entramos al patio de butacas, estábamos en la sala VIP de Moët, por dónde pasan todos los entregadores y premiados después de la entrega de premios. Desde aquí vimos cantar a Rosalia, nos emocionamos con Jesús Vidal y su discurso tras recibir el galardón a mejor actor novel, y vimos todos y cada uno de los chistes de Buenafuente y Silvia Abril, mientras brindamos por todos y cada uno de los premiados.
Una vez acabada la ceremonia, ya solo faltaba continuar la noche en la fiesta privada que organizada Paz Vega junto a Bulgari en el palacio de Villa Luisa. Desde luego, no pudo ser mejor. ¡Sin duda un fin de semana de película!
Y muchas gracias a Jesús Isnard por estar toda la noche detrás de la cámara y ayudarnos a capturar los mejores momentos de la noche ¡Os dejo alguna de las mejores imágenes!